Testimonios

Hola, mi nombre es Gregoria Chávez, vivo en Las Vegas. Siempre habíamos querido arreglar nuestra situación migratoria, mi esposo y yo, y siempre eran puras negativas con todos los abogados que consultábamos. Pero gracias a Dios que puso en nuestro camino a la abogada María Mendoza y a su equipo de trabajo. Hoy, después de 25 años, mi esposo y yo tenemos nuestro permiso de trabajo, y ya no paramos. Próximamente, con la ayuda de Dios, vamos a obtener la residencia y eventualmente la ciudadanía. No me cansaré de darle las gracias a Dios por haber puesto en nuestro camino a la abogada María Mendoza para que nos ayudara a arreglar nuestra situación migratoria. ¡Gracias!

Estoy mandando un correo con mi foto, mi seguro y mi permiso de trabajo para agradecerle a la abogada Mendoza y a sus ayudantes. Estoy muy agradecida con ustedes y en especial con la abogada Mendoza por la gran ayuda y apoyo que me brindaron desde el principio de mi caso. Gracias a Dios y a la abogada, tengo una gran oportunidad en este país. Seguimos en la lucha y les mando muchas bendiciones.

Hola, buenas tardes. Mi nombre es Federico Rico Hernández. Le quiero dar las gracias por ayudarnos, que Dios la puso en nuestro camino, y que Dios la bendiga hoy y siempre a usted y a todo su equipo. Muchísimas gracias y que Dios la bendiga.

Gracias, estamos felices y agradecidos con la firma de abogados y con Mendoza Law Firm por ayudarnos con nuestros papeles. Gracias infinitas, ¡Dios los bendiga! 

Muchísimas gracias a la abogada María Mendoza ya todo su equipo de trabajo por habernos ayudado.  

Muy buenas tardes. Antes que nada, estoy muy agradecido con Dios, porque todo es posible, y especialmente con la abogada MARÍA MENDOZA Y TODO SU EQUIPO de trabajo, quienes con su labor y excelente desempeño hicieron posible que yo obtenga un estatus legal en este país. Fue un proceso largo, pero valió la pena. Los recomiendo ampliamente. Primero obtuve el permiso de trabajo y mi seguro social, y ahora puedo contar con mi tarjeta verde o green card. Muchas gracias de nuevo.

Primeramente damos gracias a Dios por esta oportunidad que tenemos de poder tener a nuestra abogada María Mendoza. Gracias a ella estamos haciendo nuestros sueños realidad después de tantos años. Gracias, abogada, por todo el esfuerzo que hace por tanta gente que confiamos en usted. Que Dios le siga bendiciendo cada día. Y también gracias a todos los que forman parte de The Mendoza Law Firm. Muchas gracias a todos. Que Dios le siga bendiciendo.

Hola, mi nombre es Vicencio Armendariz Flores. Soy originario de Chihuahua, Chihuahua, México. Hace más de 20 años que llegué a este país con miles de sueños por cumplir, pero con el paso del tiempo me fui dando cuenta de que no era tan fácil como yo pensaba, sin un estatus migratorio legal. Un día, mirando mis redes sociales, vi a la abogada María Mendoza, y llamé para hacer una cita con ella, sí, con muchas dudas y miedos, pero ella me dio la confianza de empezar con el trámite. Y a la fecha de hoy, ya cuento con permiso de trabajo y seguro social, y los sueños se están cumpliendo día a día. Me siento más seguro en este país. Estoy muy agradecido con la abogada María Mendoza por su excelente atención y trabajo, y ahora la puedo recomendar ampliamente. ¡Ella cuenta con un excelente equipo de trabajo! ¡Gracias, abogada María Mendoza! Con su ayuda y la ayuda de Dios, hoy estoy muy feliz.

Hola, mi nombre es Maricela Escobar García, vivo actualmente en Texas. Tengo más de 23 años aquí en este país. Para mí, no tener documentos era vivir en la oscuridad, y empecé a seguir a la abogada María Mendoza ya que veía que había ayudado a mucha gente, y es por eso que la contacté. Ahora, al tener mis documentos, me siento más tranquila y con más confianza, ya que aquí vimos otros abogados y no querían ayudarme, decían que no se podía. Estoy muy agradecida con Dios, primeramente, porque me la puso en mi camino. Ahora sí, ya tengo mi permiso de trabajo, mi seguro social y mi permiso de viaje. Solo falta mi residencia. También estoy muy agradecida con Dios, primeramente, porque Él me la puso en mi camino. Muchas gracias, abogada, a usted y a su equipo. Todos son muy amables. Cuando les llamo por cualquier duda, todos son muy lindos. Gracias, abogada. Cada vez que la sigo por Facebook, me siento muy feliz de ver cómo ha ayudado a mucha gente, como lo está haciendo conmigo. Dios la bendiga grandemente. ¡Y la lucha sigue!